EL CASTILLO AMBULANTE
El castillo ambulante (título original: Howl's Moving Castle) es una novela fantástica de la autora británica Diana Wynne Jones, publicada por primera vez en 1986.
En 2004 se estrenó una película de animación que adaptaba la novela, dirigida por Hayao Miyazaki, que fue nominada a los Oscar.
La sinopsis del libro no es lo que importa de este comentario que estoy haciendo, sino la arquitectura empleada en el castillo.
La protagonista, en compañía de un espantapájaros digno de El mago de Oz, viaja hasta el castillo ambulante desde cuyas puertas se puede penetrar en los más recónditos espacios. En la configuración del metálico y destartalado castillo móvil, una arquitectura a punto de desmadejarse, y la simbiosis plástica entre personajes y fondos confluyen el arte elegante y nada evanescente de su creador.
Emplea un estilo fundamentando en una cierta idea del arte barroco. Los elementos recargados que coinciden en sus planos están perfectamente estudiados y meditados, respondiendo al intento de mostrar un mundo donde las pesadillas y la belleza se complementen.
Emplea un estilo fundamentando en una cierta idea del arte barroco. Los elementos recargados que coinciden en sus planos están perfectamente estudiados y meditados, respondiendo al intento de mostrar un mundo donde las pesadillas y la belleza se complementen.
The Walking Project fue un proyecto creado/imaginado por Ron Herron en 1964, dentro del movimiento arquitectónico y futurista Archigram.
El proyecto imaginaba un futuro sin fronteras, con un estilo de vida nómada entre las poblaciones del mundo. Se inspiraba en las torres que construía la NASA, en las plataformas de lanzamiento, en los aerodeslizadores y en los comics de ciencia ficción. Los arquitectos de Archigram imaginaban edificios itinerantes que viajaran por tierra y mar.
En el siglo XXI, los edificios no caminan y sigue habiendo fronteras, pero es verdad que como idea Walking City se anticipó a algunas de las cosas con las que convivimos ahora. Vivimos en ciudades alejadas unas de otras pero podemos comunicarnos con otras ciudades y personas instantáneamente desde nuestras ubicaciones, podemos trabajar desde casa, hacer la compra y mil cosas más. No son las ciudades las que se mueven pero sí lo hace la información.
Tomo nota de algunos de los datos de tu entrada. Muy interesante. Muy bien.
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